Tríptico.

Él esperaba un pájaro,
y las ramas acudían a su llamada,
llegaba el árbol a su encuentro,
la música, los trinos como cantos
anunciando en verano
una ansiada primavera.
Ella esperaba nadar en el invierno,
abarcando en su mirada asombrada
toda la hechura del océano,
como la sombra líquida de un sueño
le hería la distancia del agua, la sal en su trayecto,
y le iban naciendo plumas en el cuerpo
que el aire y la esperanza ponían a volar.
Ellos, se presentían en los días,
en la espera, en la piel y en tantas ganas,
como dos locos o como dos niños
viviendo en diferentes estaciones,
amasaron su esperanza con amor,
se bañaron entre sus constelaciones dérmicas
para comer de su amoroso pan,
el día que la espera les mostró su pequeña y anhelada muerte.

Despliegas aquí un tríptico sentimental donde se funden los gorjeos de los pájaros con las cíclicas estaciones. Me llama la atención esa "sombra líquida", una expresión fetén que también está en mi deixis poética; y es que tanto la luz como la sombra se prestan a un elogio.

Un abrazo, María.

Me gusta mucho la forma de cuento que le has dado al poema, con tonos de fantasía como aquellas plumas que nacen en el cuerpo que el aire y la esperanza ponían a volar.
Aunque el final no sea el "y fueron felices para siempre". Es que la vida real es bastante diferente a lo que nos cuentan de pequeños.
Un gran abrazo.

Óscar Bartolomé Poy escribió:Despliegas aquí un tríptico sentimental donde se funden los gorjeos de los pájaros con las cíclicas estaciones. Me llama la atención esa "sombra líquida", una expresión fetén que también está en mi deixis poética; y es que tanto la luz como la sombra se prestan a un elogio.

Un abrazo, María.

Gracias, Óscar por pasar y dejar tu comentario. Es un tríptico sentimental, sí, el de uno, el del otro y uno mixto que hace referencia a ambos. El poema hace referencia a las ilusiones y vivencias cuando están a uno y otro lado del charco, las diferentes estaciones son de hecho así, literalmente se vive en diferentes estaciones, es algo complicado de llevar que generalmente no acaba nunca bien...La luz y la sombra son imprescindibles de mi poesía.

Un abrazo, Óscar.

Marisol Galarza escribió:Me gusta mucho la forma de cuento que le has dado al poema, con tonos de fantasía como aquellas plumas que nacen en el cuerpo que el aire y la esperanza ponían a volar.  
Aunque el final no sea el "y fueron felices para siempre". Es que la vida real es bastante diferente a lo que nos cuentan de pequeños.
Un gran abrazo.

Bueno, no es exactamente fantasía, que si que lo es, por supuesto, esas alas que le crecen a una siempre han sido las ilusiones depositadas. Y el final hacia referencia a la muerte de la espera para conocerse, verse, etc,... una muerte de la espera muy anhelada. El para siempre no dura nunca...afortunadamente ni para lo bueno, ni para lo malo....

Un abrazo bien grande.

_María