FELIZ CUMPLEAÑOS HIJO

En esta vida, hijo mío, hay un propósito, una función y una meta
El propósito, en inicio, no fue sencillo, como a todos, te asaltaba la duda
Pero una vez ya en el punto de mira, lo encaraste, como a rima poeta
Me llena de orgullo, tu fuerza, tu voluntad y tu constancia, de falsedad desnuda.

Es cierto, he de decir, que quizá no seas el mayor comunicador de sentimientos
Pero de tu muda expresión nos damos por recompensados y queridos
Hoy cumples treinta y tres años, ya son días que conocemos de tus alegrías y sufrimientos
Tu madre, tu hermana y yo, tu padre, estamos por y para ti de por vida unidos.

Aunque no lo digamos o expresemos, con la frecuencia que deberíamos, te queremos
Tan solo deseamos que seas buena gente y feliz, esta debería ser la meta a conseguir
Hoy también eres padre y formas o conceptos antes algo abstractos para ti, igual entendemos
Tienes un hijo, nuestro amado nieto, que ha de ver en ti el modelo y ejemplo a seguir.

Gracias Ingrid
sí que es verdad se les quiere mucho
y tal vez les echemos demasiadas cargas encima
a la hora de querer que sean mejores que nosotros
más felices, más empáticos, más solidarios, más más más.
En resumidas cuentas queremos todo lo mejor para ellos.
Y puede resultar estresante.
Te envió un saludo enorme, que se corresponde, con la calidad de tu persona.

Hola Miguel:
Nuestros seres queridos son parte de nuestra poesía.
¡Qué bien que hiciste esa y qué bien te quedó!

En mi casa, mis hijos casi nacen primero que yo. Así que yo estoy jovencito y ellos pasando los 50.

Escuché tu poema "El Huerto". Digno de conocer y escuchar. La pregunta que queda ¿es tu voz?.

Por otra parte, acá en Chile los conceptos están cambiados, creo: Las cerezas son dulces y las guindas, ácidas. Un huerto tiene verduras y el lugar con frutales se llama quinta.
Ya te propuse qué podemos hacer con la parcela.

Gracias Ben, por tu grato comentario 
qué gracia, cuando dices que tus hijos nacieron antes que tú

celebro, también que te guste El Huerto.
A mi abuelo yo lo quería con locura y esto fue un homenaje
y para terminar sí que es mi voz así me quedo después de
61 años.

Gracias Rafaela
un honor que me haces visitándome
en mi estancia, para ti siempre de puertas abiertas.

Preciosos versos, Un hijo es una bendición, sin ellos la vida sería oscura, triste y solitaria, cuando llegan los nietos es una dicha mayor,
Bendiciones Miguel y bendiciones a tu hijo,

Muchas gracias, Myriam, bien dices que cuando llegan los nietos
no es el mismo amor el que les profesas, yo creo que es más tierno y sosegado
y sobre todo más libre de responsabilidad, ya la tarea de educarlos es de sus padres
la tuya mimarlos, quererlos, consentirlos...
Abrazos, amiga.