EL PATO: ¡POBRE PATO!

Un pato se encontró un huevo
Y no sabía de quien era
Podía ser de su pareja
O de una pata cualquiera

Como estaba en mitad de camino
Quiso sacarlo para fuera
Porque podría pisarlo
Cualquier cosa que viniera.

Lo mejor que podía hacer
Era empujarlo con su pichana
Y lo fue haciendo rodar
Como rueda una manzana.

Y luego que ya lo sacó
Le entró una gran emoción
No quería dejarlo botado
No era esa la solución.

Como él era un pato pobre
nunca podía pagar
Alguna pata silvestre
Que lo quisiera criar.

Pues así estaba pensando
La solución no encontraba
Que alguien le diera una idea
Eso es lo que él esperaba.

Y juntó varias piedritas
Y también algún pastito
Y con ellos construyó
Un muy hermoso nidito

Y no encontrando otra forma,
Cuando estuvo terminado
Puso dentro del nido, el huevo
Y el mismo se quedó echado.

Tres meses se quedó el pato
Cuidándolo y dándole abrigo
Sin tomar un vaso de agua
Ni probar un grano de trigo

Tres meses empollando el huevo
Tres meses pasando sed y hambre
Al final el pobre pato ya estaba
Tan delgado como un alambre.

Y entonces sintió que debajo
De su cuerpo algo se movía
No debía ser otra cosa,
Seguro que era la cría.

Claro que había nacido una cría
Y se notaba demasiado valiente
Pero no era ningún patito:
¡Era una tremenda serpiente!

Como nunca había comido
Y estaba con gran apetito
Lo único que se le ocurrió
Fue comerse a nuestro patito.

Primero lo miró feo
Y luego lo mordió
Abrió la boca muy grande
Y enterito se lo tragó.

Y esa es la historia señores
No olviden quien la contó
El pato quiso hacerse la pata
Vean en que terminó.

Bertoldo Herrera Gitterman
03 05 20