Certezas complejas

Dios espera que me someta
mientras me tiembla la Naturaleza
quiere que coja la cuerda
y ponga fin a su crudeza.

Me hago el sordo y el loco
y desoigo sus malos modos
me aferro al lobo y al raposo
que sortea los lodos rabioso.

Me promete un cielo de estrellas
un firmamento en recompensa
y cesar de buscar certezas
en esta Tierra que tanto me aterra.

Pero sus promesas son toco mocho
es un mentiroso peligroso
no tiene respuestas tampoco
a lo que me interrogo.

Mas respuestas me dan las fieras
la selva las mareas unas tetas
que toda su sapiencia eterna
supuesta por su mente enferma.

O Dios no existe o es tonto
pero tonto tonto tonto del todo
o la ha cagado con nosotros
o es falso su concepto todopoderoso.

O eso, o que es a lo que se asemeja
caos incertidumbre guerra
hambruna locura ceguera
o una selva que se alimenta de ella.

Esto es el infierno, coño
si me alimento del otro...
sea vegetal animal o el globo
tengo que pensar que soy respetuoso ?

Todo está vivo... la tierra el planeta
la luna la galaxia toda inmensa
todo siente todo piensa
desde las piedras hasta los cometas.

Bienvenido al foro, Ramón.

Me ha parecido que tu poema, aunque es ambicioso en cuanto a su idea motriz, tiene muchas fallas en la forma: asonancias, falta de puntuación (que en este caso juzgo necesaria), etc. También creo que esa rabia hacia Dios se puede expresar sin tantas palabras malsonantes que le restan todo lirismo.

Saludos.

Creo que es acertado el análisis que ha hecho, Óscar, del poema. Lo mejor la intensidad que le pones. Un saludo y bienvenido.

Gracias, compañeros, por la bienvenida. Tenéis toda la razón en las correcciones que me hacéis, podría subsanarlas , pero forman parte de mi estilo. No me atengo a la RAE, si, al hilo conductor de cada escrito, para no perder veracidad en lo sentimental de lo que quiero expresar en cada verso que tecleo , sin saber como será el siguiente. Dejo discurrir mi mente, no, mas bien divagar, por unos instantes, y encadeno, uno tras otro, mis pensamientos, dejando fluir lo que siento. Solo quiero soltar mi rienda sin esperar llegar a las estrellas de las letras ni enfermar como ellas, si no sueltan y dejan volar lo que atormenta su alma.

El poema me gusta mucho, aunque encuentro un exceso en las referencias que haces a Dios, lo siento, debe ser porque no soy creyente
Saludos,
arina.

Gracias por tu comentario, Marina.