La salud.

La salud puede ser una terraza de tarea inexorable, un corazón latiendo al infinito por una trama vertical de trampa simple. Escribir es salud; escribir puede ser una terraza de vida tan saludable como el sexo, una tarea tan absurda como hablar de la salud o de la vida ¿La salud tiene lógica? ¿Quién conoce la salud o la vida? La totalidad mejora y empeora; la salud puede socializar o no. La salud está siendo como intentando amarme cuando yo solamente sucediendo en carne trascendida por el viento o en logros silenciados por las tapias de una cárcel con calles.
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La salud puede ser recrearse en la tristeza del verano y ahogar una garganta áurea en el frío por saber que al margen de los funerales de los antes enfermos florecerán otra vez las flores en otra primavera nueva; la salud tiene su contenido ético o moral o su geografía o su misterio u otras nociones que dispersan: la salud entre otros puede ser un motivo para la guerra o una sombra de opacidades o una palabra de cinco letras o de dos sílabas que solitaria en el infinito de las soledades.
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Es estúpido querer razonar en una sociedad que estando de forma absurda para el dicente como estúpido es escribir de la salud con el cansancio de mis ojos o con el llanto de mis ojos: para ser concreto en mi pensar diría que la mala salud puede ser un palacio acogiendo otra salud no deseada, y que la buena salud puede ser una cama sorda de amor en mi memoria.
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La vida conlleva en sí misma la salud ¿Escribo esta redacción porque tocando los huevos de las gallinas o por la esclavitud ilegal o por mi nada?

La salud puede ser una trampa pública a un vagabundo atracado, un anzuelo de camuflajes pobres. Con todo - y al hilo de hablando de la salud- entre otros ya me quitaron de forma ilegal mi casa o mi dinero o mi familia o mi salud querida, y entonces sea la salud una lotería entre las loterías de la cárcel social.
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La salud puede ser un policía de rostro amable; la salud puede ser un policía de ladrón gesto. La salud puede ser una vana palabra solitaria; fisiológicamente la salud es inherente a la vida.
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Mucho podría escribir acerca de la salud que es una terraza de tarea inexorable donde en diez minutos escribí este texto que yo ya terminando.

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Ismael López Pozo.

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Pienso que la salud debe partir del individuo, como responsabilidad, amor propio y compromiso hacia el resto de la sociedad. Es deber nuestro procurarnos salud.