Con el orgullo lleno

Con el orgullo lleno, grito a cada instante
y sin temor, las veces que te miré,
a escondidas, como un tímido gigante
cuyo amor nunca te diré.

Siempre estuve ahí, aunque no me vieras,
con los brazos abiertos a tu amor,
más de una vez, quise que tú quisieras
besar mis besos, sin ningún temor.

Mañana vuelvo al sitio donde nos conocimos
y te vi radiante como reina del carnaval,
princesa siglo veintiuno, nos detuvimos
tú soñando sueños y yo, amándote fatal.

Los libros que he leído nunca tienen principio,
mi moneda no tira a cara o cruz,
cada viernes caigo al precipicio
y tu imagen, como sol, ofreciéndome la luz.

Mañana vuelvo al sitio donde me olvidaste
y me quedé a tientas, con tristeza sincera,
ayer que te vi, no me recordaste
y no lloré, porque te amó mi alma entera.

Bonito poema amigo