Cerré los ojos y la besé, abrí los ojos y estaba solo.

De todas las cosas del mundo
escribimos sobre las que no importan.
El arte es lo más mediocre
bajo la atmósfera.
Juntamos palabras con gracia
como un niño coleccionando mariposas,
a sabiendas de que están muertas
cuando las clavamos en nuestras hojas.
¿Qué espera la nueva letra
qué viene a mi caja de ideas vergonzosas?
Morir tras un corto momento
de acercamiento a personas odiosas;
llenas de miedo, como yo,
muertas de amor, entre otras cosas...
Vinimos al mundo a crear
formas de gritar silenciosas.